El salmón viene normalmente en rodajas de entre 150 y 250 gramos cada una, envasado en atmósfera protectora y tiene un precio de 11€/kg. Por su parte, los brócoli para vapor se presentan en una bolsa de plástico de 230 gramos cuyo único ingrediente es brócoli. La cocción se realiza en el microondas a máxima potencia dentro de la propia bolsa y su precio es de 1,20 €.

INGREDIENTES (Para 2 personas)

 PREPARACIÓN

1. Metemos la bolsa de los brócoli cerrada en el microondas durante 5 minutos a máxima potencia. al acabar, sacamos la bolsa del microondas, la abrimos con cuidado porque suelta vapor muy caliente y ponemos los brócoli en un plato. Sazonamos con sal, pimienta negra y AOVE al gusto.

2. Lo que yo llamo salmón encostrado no es más que salmón frito con poco aceite, lo que permite que quede dorado y crujiente pos fuera y bien jugoso por dentro. La razón de usar este tipo de preparación es doble, en primer lugar porque me gusta mucho como queda y en segundo, porque he llegado a la conclusión de que el salmón es de esos pescados que no se pueden hacer directamente a la plancha. Cuando lo ponemos en contacto con la superficie bien caliente, las proteínas superficiales se desecan y desnaturalizan rapidamente y tienen una tendencia natural a adherirse a la plancha, convirtiendo tu rodaja de salmón a la plancha en migas de salmón al punto de cocción variado. Por eso es necesario que haya aceite en la sartén, no mucho, pero suficiente como para que se pueda alcanzar buena temperatura manteniendo a la vez una adecuada lubricación entre el pescado y la sartén.

3. Después de esta explicación empírica, volvamos al lío. Salpimentamos el salmón en crudo por ambas partes. Calentamos la sartén a fuego medio-alto con una fina capa de aceite en el fondo y cuando esté caliente colocamos el salmón dentro. Es importante en los primeros instantes mover un poco el salmón en la sartén para que el aceite lubrique bien toda la superficie del salmón. Bastarán tres o cuatro minutos por cada lado para obtener un salmón bien doradito. El momento de darle la vuelta es importante porque es fácil romper el pescado si está poco hecho o no tenemos cuidado. Usa dos espátulas de madera, una por cada lado y verás como sale perfecto.

4. Emplatamos cada rodaja de salmón con una buena ración de brócoli.

COMENTARIOS

Nuestra cena fullera de hoy se puede considerar un éxito. El salmón salió muy bueno, es cierto que no está tan bueno como el que compro a veces en la plaza a 18€ el kilo, pero el resultado da una óptima relación calidad-precio, uno de los objetivos fundamentales de las cenas fulleras.

Los brócoli salen también muy buenos, tienes que acertar con el punto de cocción, y lo tienes que hacer con tu microondas, más vale que te quedes algo corto de cocción y luego completes, porque si te pasas, no tiene solución y no están tan buenos.

Para el salmón he usado sólo pimienta porque me gusta que destaque su delicado sabor natural, pero admite bastante juego de especias que ya dependerá de vuestro gusto y vuestra osadía. En cuanto a los brócoli, admiten también muchos acompañamientos, cambiando especias, con una vinagreta de pimentón o por qué no, con especias orientales o marroquíes.

El salmón es un alimento muy recomendable desde el punto de vista nutricional, se encuentra dentro del grupo de los pescados azules o pescados grasos, de hecho aporta unos 11 gramos de grasas por cada 100 gramos de producto, pero esas grasas son saludables, ricas en omega-3, que ayuda a reducir el nivel de colesterol y a mantener más fluida la sangre. aporta proteínas de alto valor biológico y una gran variedad de minerales y vitaminas hidrosolubles del grupo B y liposolubles (A y D). El único pero que podemos ponerle es que es un alimento rico en purinas, que en el organismo se transforman en ácido úrico, por tanto su consumo debe ser limitado en personas con hiperuricemia o gota.

El bócoli es también un alimento muy intersante nutricinalmente, destaca por un contenido en proteínas bastante alto, casi un 3%, por su contenido en fibra alimentaria protectora del aparato digestivo y, sobre todo, por su alto contenido en vitamina C, con una ración casi se cubren las necesidades medias de una persona para un día.

El aporte energético de una ración de salmón y brócoli sería de unas 350 kcal y su coste sería de aproximadamente 2´80 € por persona.

Por tanto podemos concluir que resulta un plato asequible, muy sano y equilibrado, ideal como cena fullera, es por ello que el salmón fresco envasado del Mercadona y los brócoli para vapor Verdifresh pasán con nota a nuestra despensa fullera.

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